VIDA |
Muchos suponen que se puede vivir de cualquier manera, pero resulta que la Biblia dice algo muy distinto. En la Carta de Santiago se nos indica que es fundamental, por ejemplo, controlar las palabras, e inmediatamente nos dice cuál es la verdadera relligión:
Tampoco es aceptable excusarse en lo que hacen otros (comenzando por lo que algunos curas hacen) para justificar su manera de vivir. Que nadie lo dude: cada quien es dueño de su destino. Que no se excuse en otros.
Dice San Pablo:
No nos hagamos ilusiones. Todos los días desarrollamos un combate espiritual con fuerzas que quieren perdernos.
Pero el Señor nos da las herramientas para vencer. ¿Qué se nos pide? "Que lleven una vida digna del Señor y de su total agrado, produciendo frutos en toda clase de buenas obras y creciendo en el conocimiento de Dios." (Colosenses 1, 10) Tienes que cumplir con todos los mandatos de Nuestro Señor "Porque si alguien cumple toda la Ley, pero falla en un solo punto, es como si faltara en todo" (St 2, 10). Fíjate que Dios, cuando establece uno de sus pactos con Abraham le dijo "Camina en mi presencia y sé perfecto" (Gn 17, 1) El cristiano incluso debe abstenerse de las malas palabras:
Uno debería tener presente a santos como San Alonso Rodríguez, un hombre que alcanzó la santidad desempeñando con humildad perfecta el trabajo de portero de un colegio, cumpliendo con aquella regla de vida entregada por San Pablo: "Todo cuanto hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres" (Col 3, 23). Estamos llamados a seguir a Jesucristo, pero no de cualquier manera, sino como El nos enseñó. Por eso dice San Juan:
Los católicos solemos olvidar esto, lo que conduce a absurdos como afirmar nuestro catolicismo y declararnos a favor del aborto o cosas peores. Y eso ocurre porque la mayoría de nosotros nos hemos inventado una fe a nuestra medida.¿Quién dijo, por ejemplo, que la Fe Católico permite las borracheras y todos esos comportamientos que tan pésima propaganda hacen al catolicismo? Dice la palabra también: "No sigas a la mayoría para obrar mal..." (Ex 23, 2) Pensemos en temas tan serios como el deber de evitar cualquier forma de pecado. Ni las "mentiras blancas" o "mentiras piadosas" están permitidas, porque Jesús nos invita a ser como El, y en El no había mentira.
Y por favor, que no apoyemos en terceros nuestra justificación: es que tal persona, laico o sacerdote, hace tal o cual cosa. ¿Quién dijo que a ti te juzgarán por lo mal que se comporta tal o cual persona? Si vas a tomar como norma de vida el comportamiento de alguien, pues que ese alguien sea Jesucristo, porque como advierte el profeta Jeremías: maldito el que pone su confianza en otro hombre (Jr 17, 5-7). Que nuestra Fe no sea cambiante ni siquiera en medio de la tragedia. "Mas yo, como un olivo verde en la Casa de Dios, en el amor de Dios confío para siempre jamás" (Sal 52,10)
La vida en las enseñanzas de Cristo no es de un momento, debe ser permanente.
¿Has pensado, hermano, en que en un minuto puedes estar muerto? Entonces nos enfrentaremos al juicio y será tarde si no somos del Señor (Ap 14, 13).
Concluyamos con el magnífico llamado nos hace la Biblia:
Lecturas complementarias: "EL AMOR EN LA ANTIGÜEDAD BÍBLICA" de Marcial Cardozo (REVISTA BÍBLICA Año 32 - 1970 Págs. 291 - 294) "LA CONCIENCIA, ¿JUZGA O DECIDE? CONTROVERSIA ACTUAL" (R.P. Lic. José Gustavo GIUNTA, I.V.E.) "La conciencia y el magisterio"(análisis desde la teología moral) La vida de Santa María Magdalena de Pazzi, ejemplo del sentido del dolor "La conciencia y la ley de Dios" Documento papal: "El infierno como rechazo definitivo de Dios" Pecado Original - Bautismo ¿Cómo el Pecado Original alcanza a todos? |